Mirame, siente mi palpitar, siente como respiro, ves como lentamente va cambiando mi pulso? ves como comienzo a respirar dejando el aire fluir hasta el fondo de mis pulmones y soltándolo como si no quisiera dejarlo huir?
Te veo, y al hacerlo me veo, nos veo. Observo como poco a poco nos complementamos, como sin querer nos tomamos de las manos, y sin dejar de vernos lentamente nos acercamos. Te siento, te veo y me rio, es una risa complice, una que reemplaza mil cursilerías y quinientos te quiero.
Bajo la mirada, la vuelvo a alzar. Seguís ahí mirándome, viéndonos. Casi sin querer nos acercamos lentamente y poco a poco sellamos esas mil cursilerías y esos quinientos te quiero ocultos tras nuestra mirada, lo que anhelamos del otro con tan solo un beso. Una simple muestra de cariño que lo dice todo.
Y al volvernos a ver únicamente nos queda suspirar y permitirle a los sentimientos fluir, seguir su curso.
